domingo, 11 de junio de 2017


" El que haya conquistado el poder de poner de lado sus caprichos y sus voluntades personales para servir un ideal y unos principios elevados; el que sepa siempre cumplir con su deber, inclusive cuando este cumplimiento vaya en contra de sus inclinaciones naturales y sus simpatías, éste es ya, inconscientemente, en la vida ordinaria, un iniciado." RS

"Y ya le falta muy poco para poder triunfar en la prueba descrita esta prueba se le llama "prueba del agua", porque se pierde el terreno firme que procuran las condiciones exteriores, del mismo modo que a aquel que nada en un lugar de aguas muy profundas le falta todo tipo de apoyo. La prueba debe ser renovada hasta que el candidato haya conquistado una perfecta seguridad. 

Mediante esta prueba, también se trata de adquirir una cualidad nueva y, a través de estas experiencias en los mundos superiores, se puede llevar en poco tiempo esta cualidad hasta un grado que normalmente no se habría podido alcanzar sino después de numerosas encarnaciones. 

El punto esencial es el siguiente: para obtener la transformación requerida en esta región superior de la existencia, el candidato no debe seguir ninguna otra indicación que su percepción espiritual y lo que haya descifrado mediante el lenguaje secreto. Si, en el curso de la acción que debe cumplir, sus deseos, sus opiniones, etc., ejercitan sobre él la menor presión y olvida un solo momento conformarse a las leyes que personalmente ha reconocido como verdaderas, entonces ocurrirá una cosa completamente distinta a la que debe ocurrir. El candidato dejará muy pronto de orientarse hacia el fin de su acción y la confusión le extraviará. Mediante esta prueba, al hombre se le presenta también una ocasión excepcional para desarrollar el dominio de sí. Y en este punto hay que llamar la atención otra vez: esta prueba será superada con mayor facilidad por aquellos que, antes de la iniciación, hayan llevado una existencia capaz de brindarles el dominio de sí mismos. El que haya conquistado el poder de poner de lado sus caprichos y sus voluntades personales para servir un ideal y unos principios elevados; el que sepa siempre cumplir con su deber, inclusive cuando este cumplimiento vaya en contra de sus inclinaciones naturales y sus simpatías, éste es ya, inconscientemente, en la vida ordinaria, un iniciado. Y ya le falta muy poco para poder triunfar en la prueba descrita. 

Digamos inclusive que es indispensable haber adquirido ya inconscientemente en la existencia un cierto grado de iniciación para afrontar con éxito la segunda prueba. 

En efecto, las personas que no han aprendido desde su juventud a escribir correctamente experimentan grandes dificultades para hacerlo en la edad madura. Del mismo modo, será difícil, en presencia de los mundos superiores, alcanzar el grado necesario de dominio de sí, si no se posee un cierto grado de él en la existencia cotidiana. Las cosas del mundo físico permanecen siendo lo que son cualesquiera que sean nuestros deseos, pasiones y tendencias modifican el entorno; si nosotros queremos pues obtener en nuestros dominios un resultado cierto, es preciso que tengamos un completo dominio de nosotros mismos y sigamos únicamente la regla de conducta perfecta, sin ceder jamás a la arbitrariedad. 

Una cualidad esencial en este estadio de la iniciación es, sin discusión, un juicio seguro y sano. Hay que tener buen cuidado de desarrollarlo desde los primeros grados, porque en estos momentos el candidato debe demostrar que lo posee en la medida suficiente como para penetrar en la verdadera senda del conocimiento. Es imposible que progrese si no tiene el discernimiento que le permita distinguir la verdad de todo cuanto es ilusión, fantasmagoría, superchería, superstición o espejismo. En los grados superiores de la existencia, este discernimiento es mucho más difícil que en el mundo físico. Todo prejuicio, toda opinión obstinada debe desaparecer ante la importancia de lo que se aborda; la verdad única debe servir de brújula. Se debe estar completamente preparado para abandonar un pensamiento, una opinión, una visión personal si el pensamiento lógico lo reclama, porque no se pueden adquirir certezas en el mundo superior más que si se renuncia para siempre a halagar la propia opinión. 

Los hombres inclinados a las fantasías, las ensoñaciones, las supersticiones no pueden hacer ningún progreso en el sendero. El investigador debe adquirir un bien precioso: el de librarse de toda duda respecto a los mundos superiores. Estos se van a revelar a su mirada en su esencia y según sus leyes. Pero ello no ocurrirá mientras la persona en cuestión se deje prender por espejismos e ilusiones. Sería peligroso para ella que su imaginación o sus prejuicios ofuscasen su razón. Los fantasiosos y los soñadores no tienen condiciones para el ocultismo, como tampoco las tienen los supersticiosos. Nunca se repetirá esto bastante. La ensoñación, la imaginación desbocada, la superstición son los peores enemigos que acechan al discípulo en su tránsito por el sendero del conocimiento espiritual. No se figuren ustedes, sin embargo, que la poesía de la vida, el don de entusiasmo se les va a escapar por haber leído sobre el umbral de la puerta que lleva a la segunda prueba estas palabras. "Abandona todo prejuicio", y sobre la puerta que conduce a la primera, estas otras: "sin buen sentido a toda prueba, todos los pasos son vanos". 

Si el candidato ha progresado suficientemente en este sentido, le espera la tercera prueba. Aquí, él no percibe ya ningún objetivo exterior. Todo está en sus manos. Se encuentra en una situación donde nada le impulsa a actuar. Está completamente solo para encontrar su camino y no hay en torno suyo ningún ser ni ninguna cosa que le pueda influenciar. Nada ni nadie podrán darle fuerza dentro de sí, pronto se encontrará en el mismo lugar en que se encontraba antes. Pero es preciso decir que, entre los que han salido airosos de las pruebas anteriores, hay pocos que no sean capaces de encontrar esta fuerza. O bien se ha quedado uno en el camino en una de las etapas precedentes, o bien se triunfa también ahora. Lo esencial consiste en ver con claridad sobre el terreno, porque aquí es preciso encontrar su Yo superior en el verdadero sentido de la palabra. Hace falta decidirse rápidamente a seguir en todo la indicación del espíritu. Ya no hay tiempo para deliberar o para plantearse dudas. El más breve momento de vacilación demostraría que todavía no se está maduro. Todo lo que impida prestar oídos a los consejos del espíritu debe ser esforzadamente superado. La cualidad de la que es absolutamente necesario dar testimonio en esta situación es la presencia de ánimo, que es precisamente también la cualidad que, en esta fase de la 
evolución, se trata de llevar a la perfección. Todo lo que conduzca a pensar o a actuar por costumbre o por reflejo desaparece. Para no sentirse paralizado es necesario no perderse a sí mismo, porque no le queda a uno más punto de apoyo que uno mismo. Ninguno de aquellos que lean estas líneas sin estar familiarizados con estos temas debe dejarse desanimar por la prueba de verse arrojado sobre sí mismo de esta manera. Porque el que la supera conoce una profunda felicidad. 

Aquí, al igual que en los otros casos, la vida ordinaria es ya para muchos hombres una disciplina oculta. Para aquellos que en la vida se han vuelto capaces de tomar una rápida decisión sin vacilar ante situaciones que se presenten de improviso, la propia existencia constituye de por sí una escuela. Las situaciones más favorables son aquellas de las que es imposible salir si no se toma una decisión sobre la marcha. Si, en un caso en que un minuto de vacilación podría causar una desgracia, ustedes son capaces de tomar una decisión inmediatamente, y si esta rapidez de decisión se ha convertido en parte integrante de vuestro ser, ya han adquirido ustedes, inconscientemente, la madurez necesaria para afrontar la tercera prueba, porque ésta está destinada precisamente a perfeccionar la presencia del ánimo. 

En las escuelas de ocultismo a esta prueba se la denomina "la prueba del aire", porque el candidato se encuentra privado tanto del apoyo sólido de los impulsos venidos de fuera como de la ayuda de las percepciones espirituales de formas, colores, sonidos, etc., adquiridos en el curso de la preparación y de la iluminación. Queda reducido exclusivamente a sí mismo, a sus propias fuerzas."

las pruebas..."
Rudolf Steiner.
Edicion e Imagen Lindargamez

lunes, 20 de marzo de 2017

Felices Fiestas de Primavera y Festividades del Otoño. Calendario del alma




Felices Fiestas de Primavera y Festividades del Otoño
                     Calendario del alma
                         (Hemisferio Norte)

                              Del 19 al 26 de marzo
                                  W Cuadragésima novena semana

Experimento en mí la vitalidad   de la existencia de los mundos.
Así lo expresa el  pensamiento en plena claridad,
Evocando el crecimiento del espíritu
En las noches de las tinieblas de los mundos,
Volcando    hacia  el cercano día universal
El fulgor en el interior de la esperanza.

Rudolf Steiner

                                 Calendario del Alma
                                           W semana décimo cuarta
                     (Hemisferio Sur)
                       Del 19 al 26 de marzo

El encantamiento  de los sentidos
Se desvanece con el otoño...
Fusionándose en la revelación de la luz
Un  oscuro velo  de niebla;
En las lejanías del espacio cuando el otoño  aparece
Es el sueño de invierno que mis ojos contemplan.
El verano entero  que  Se me ha entregado.


Rudolf Steiner

Traduccion al  frances Athys floride
Al castellano y edicion Lindargamez


lunes, 13 de marzo de 2017

Calendario del Alma, Hemisferios Norte-Sur del 12 al 20 de Marzo, Rudolf Steiner







Calendario del Alma
(Hemisferio Norte)
 V Semana 48
Del 12 al 20 de marzo

      En el brillante resplandor  que desciende de los espacios
Y, lleno de fuerza, busca penetrar en el alma
Surge, arreglando  el enigma interior,
En la certeza  del  pensamiento universal!
Concentra el poder de su influencia
Para despertar el amor en el corazón del ser humano.

                     ***

         Calendario del Alma
(Hemisferio Sur)
V Semana 13
Del  12 al  20 de marzo
      
              El ser universal  derrama luz
Que  prolonga poderosamente  su existencia en mi,
Convirtiéndose en claridad del alma,
En las profundidades de mi espíritu brilla,
Liberando así los frutos,
que  a través del curso de los tiempos el Yo del Universo
Ha hecho  madurar  en el Yo del hombre.


Rudolf Steiner



Traducción al francés :  Athys Floride
Al castellano y
edicion Lindargamez
















martes, 7 de marzo de 2017

Meditacion del Mes de Marzo (Piscis, Virtud del Mes), Rudolf Steiner


     MARZO   
La Magnanimidad se convierte en Amor              
                                          
                                                                               PISCIS  
              DEL 21 DE FEBRERO AL  AL 22 ABRIL
       
QUE EN LO PERDIDDO SE ENCUENTRE LA PERDIDA,
           
QUE EN LO GANADO SE ENCUENTRE LA GANANCIA,
            
QUE EN LO ALCANZADO SE BUSQUE COMPRENDER
           
Y SE MANTENGA AHORA.
PARA QUE EN EL FUTURO SE ELEVE LA EXISTENCIA,
POR LA EXISTENCIA SE ENTREMEZCLE EN EL FUTURO,
QUE LA PERDIDA SEA UNA GANANCIA PARA SI.
                                                
Rudolf Steiner
Edicion Lindargamez

lunes, 13 de febrero de 2017

Calendario del Alma (Hemisferio Norte Hemisferio Sur)



            Calendario del Alma
           Cuadragésima séptima semana
             Del 12 al 20 de                                            febrero                                                (Hemisferio Norte)

        La alegría de ser y de vivir,
Desde el seno mismo del universo cuando aspira a renacer,
Refrescando el brillo que el mundo ofrece a  nuestros ojos,
Encuentra la fuerza escondida en mi pensamiento,
   Que los mismos Dioses le han dado vigor.



                    Calendario del Alma
              Sexta semana
           Del 12 al 20 de febrero  (Hemisferio Sur)
     
  Desde el seno del ser humano, la personalidad
   Que se eleva, se encuentra,
Manifestación del Universo mismo,
En las fuerzas del tiempo y del espacio.
    De la divinidad, imagen original
El mundo  a mi  mirada revela en todas las cosas,
    Que en verdad yo soy fiel reflejo del mundo.


Rudolf Steiner
     Traducción al francés Athys Floride

Al castellano  y edicion Lindargamez